El café puede ser encontrado de varias formas, en grano, molido, en cápsulas…, de esto hablaremos más adelante, aunque independientemente del formato en el que lo encontremos, la calidad del café depende de otros factores como: tipo de semilla, condiciones del lugar de cultivo de la planta, forma de recolección y por supuesto, forma de procesado. Todo ello hará que el café final que llega a nuestra taza tenga mejor sabor y cuerpo. Y esto los “amantes del café” lo sabemos y apreciamos.
Una de las primeras clasificaciones que se hacen a la hora de hablar de café es su tipo. Hay dos tipos de café a distinguir: café arábica y café robusta.
¿En qué se distingue un café arábica de un robusta?
La principal diferencia es su procedencia que, como comentamos anteriormente, es uno de los factores que influirá en la calidad, sabor y características del café.
El café robusta, que procede de la planta Coffea Canephora, procede de zonas de Africa Central. Estas son zonas secas, lo cual hace que el café robusta tenga un sabor más amargo, sea menos digestivo y contenga mayor grado de cafeína. Suele ser considerado como un café de menor calidad, además la planta del café robusta es menos delicada a la hora de cultivarla, es por ello que su precio suele ser menor al del arábica.
Por otro lado, nos encontramos con el café arábica. Su origen es Etiopía y procede de la planta Coffea Arábica. Hoy puede cultivarse en otros países, siempre que sus zonas de cultivo se encuentren entre los 500 y 2.400 metros de altitud. Es un café con muy poca cafeína (no suele superar un 1,7%), muy aromático, suave al paladar y muy digestivo. Existen unos 200 tipos de cafés arábica que además se subdividen en subtipos.
El cultivo de la Coffea Arábica requiere de un clima fresco subtropical, sol y sombra y una tierra especial. Es una planta bastante vulnerable al frío y a los insectos. Requiere mucho más cuidado, lo cual hace que sus granos sean más costosos de conseguir y su precio sea más elevado.
Y de lo que veníamos a hablar…
¿Qué hace que un café sea gourmet?
El café gourmet o premium se compone en un 100% de Arábica y debe ser cultivado y procesado en las mejores condiciones. Es aquel que se obtiene solo de los cerezos rojos y maduros, granos que deben ser procesados con agua y secados al sol para luego ser tostados.
En cuanto al tueste, no se debe producir sobre-tueste ya que haría que el sabor luego se amargue y oculte el sabor natural del café.
En cuanto al almacenamiento, debe ser envasado en un sobre o paquete que le permita respirar. Si no se almacena adecuadamente el café tenderá a oxidar, reduciendo su aroma, sabor y calidad.
¿Mejor en grano o molido?
Por lo general, el café que ya ha sido molido ha estado más expuesto a la oxidación lo cual puede hacer que pierda parte de su sabor y aroma.
En cuestiones de comodidad, comprar el café molido nos evita tener que disponer de un molinillo de café, dispondremos del café en cualquier momento y por lo general, si lo compramos ya molido, no tendremos que preocuparnos del grosor del molido, ya que en los cafés comerciales suele venir especificado para qué tipo de cafetera ha sido molido.
Aunque los que nos consideramos muy cafeteros esas comodidades nos importan menos. Preferimos disfrutar de todo el ritual de preparación del café, incluido el molido del grano, y disfrutar con todos los sentidos.
En Nexsy ofrecemos las mejores variedades de café porque somos “muy cafeteros” (puedes verlas aquí) y además te ofrecemos unas máquinas de café de alta calidad donde podrás degustar un café recién molido y, si lo prefieres, con leche fresca además (Corner Coffee).
